Para ser el presente y futuro de Ferrari se necesita de trabajo, sacrificio y el talento que unos pocos poseen. Charles Leclerc, comienza a ver los frutos de este esfuerzo este 2022 siendo firme candidato a ser campeón del mundo.
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5 temporadas, 83 Grandes Premios, 11 Pole positions, 6 vueltas rápidas, 631 puntos y 4 victorias son las cifras que sostienen al monegasco como uno de los mejores pilotos del planeta.
Nacido en el principado de Mónaco, Charles Leclerc tuvo la fortuna de arrullarse una vez al año, desde 1997, con el sonido del motor de los Fórmula 1 en el Gran Premio de esta ciudad. Es así como esta historia de amor con el automovilismo parecía estar predestinada a consumarse en algún momento, un momento que llegó en 2018 con su debut en Alfa Romeo.
Antes de llegar a Fórmula 1 es necesario hablar de la gran temporada de Charles en la F2: campeón en su año de debut con 72 puntos de ventaja sobre el segundo. Ganar siendo novato es algo que muy pocos pilotos tienen, pero lo que aquí se destaca es la amplia ventaja que le sacó a sus competidores y predestinaba para Leclerc una sendero de éxitos fruto del sacrificio. Sin embargo, para hablar de este piloto hay que salir de las pistas y hablar de lo personal pues en la vida de Charles es necesario hablar de la influencia de su padre Herve Leclerc y su “mentor” Jules Bianchi.
Su padre fue piloto en la década de los 80. Si bien nunca llegó a la Fórmula 1 tuvo una gran carrera en Fórmula 3 hasta que lo tuvo a él y a su hermano, en este momento decidió colgar el casco y ponerse la ropa de casa para criarlos, eso sí sin dejar el automovilismo de lado. La inversión de Herve se centró en los karts y en incluir a sus hijos en este mundo. Para este momento de la historia aparece Jules Bianchi, otro piloto de karting que influyó en esa pasión de Charles para iniciar la senda del campeón a la cual estaba destinado. Jules, quien era 8 años mayor, apoyaba al joven Leclerc en sus competencias mientras que Charles veía con ilusión el talento de Bianchi como algo a lo que él quería aspirar.
El tiempo transcurrió y Leclerc comenzó a hacerse un nombre en categorías inferiores mientras que Jules Bianchi se hacía un lugar en Fórmula 1 con Marussia en los años 2013 y 2014. Bianchi, quien fue uno de los primeros integrantes de la escuela de pilotos de Ferrari, estaba perfilado para convertirse en nuevo piloto de la Scuderia. Un talento nato y notorios resultados con un equipo que no aspiraba a más que el fondo de la parrilla lo hacían una joya que tristemente la vida no dejó llegar a su máximo esplendor. Un fatídico 5 de octubre de 2014 durante el Gran Premio de Japón, el francés sufrió un accidente terrible que lo dejó en estado crítico hasta que el 17 de Julio de 2015 falleció a poco tiempo de cumplir 26 años. De esta forma se apagó la luz de una promesa que dejaba devastado no solo al mundo de la Fórmula 1 sino también a un Charles Leclerc quien, sin saberlo, cargaba con la última voluntad de Jules: ser piloto de Ferrari.
Volviendo al 2018, Leclerc debutaba con Alfa Romeo en una temporada marcada por una lucha sin cuartel entre Mercedes y Ferrari que terminó con una nueva victoria del equipo alemán, quien con Lewis Hamilton se alzaba con un nuevo campeonato consecutivo. El monegasco gozó de una temporada de ensayo y error donde se le recuerda por su gran carrera en Azerbaiyán donde terminó en sexta posición. 39 puntos durante la temporada fueron el número mágico para que Ferrari decidiera ascender a Leclerc al equipo para ser compañero del tetra campeón, y líder del equipo, Sebastian Vettel. El sueño se cumplió y la voluntad de Bianchi parecía estar en las manos del mejor, su gran amigo Charles Leclerc.
Así inició la temporada 2019, con Vettel y Leclerc buscando devolver a Ferrari a la gloria pero con la condición de que Charles sería segundo piloto, al menos al principio. Desde la primera carrera el monegasco dio el golpe sobre la mesa quedando 5 y mostrando mucho más ritmo que su compañero. Bahrein sería una demostración de intenciones pues la victoria estuvo en las manos de Ferrari y su joven piloto, algo que pudo haber sido realidad de no ser por una falla en el motor que lo hizo perder la ventaja y verse relegado a la tercera posición; cosa que igualmente significó su primer podio en la categoría y en Ferrari.
La temporada siguió su curso y el poderío del piloto de Mónaco llegó en el Gran Premio de Bélgica. Después de hacerse con la Pole, Leclerc lideró la carrera hasta hacerse con su primera victoria en la Fórmula 1. Un triunfo con sabor amargo pues el día anterior un gran amigo y piloto de Fórmula 2, Antoine Hubert, falleció en un accidente en este mismo circuito.
Una semana después, Leclerc repitió la hazaña en Italia. Pole position y victoria tras defenderse con uñas y dientes el embate de Lewis Hamilton. Un hecho que marcó el destino de Ferrari pues, se dice en Maranello que, ninguna temporada es mala si se logra la victoria en Monza, el gran premio de casa. Este hecho dejó una de las mejores narraciones en la historia de la Fórmula 1 en la voz del italiano Carlo Vanzini.
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De aquí en adelante la temporada fue a menos pues el momento de Ferrari se apagó y se vio envuelto en la polémica por la relación entre sus pilotos. Ninguno estaba dispuesto a ser segundo piloto y eso generó roces que desembocaron en el incidente de equipo durante el GP de Brasil en que por un choque entre los dos, ninguno pudo terminar la carrera. Finalmente la cereza del pastel la puso la FIA que tras los llamados de atención de varios equipos encontró ilegal el motor Ferrari, cosa que puso al equipo contra las cuerdas y contra el tiempo para la temporada 2020, año nefasto que Leclerc pudo rescatar para el equipo con 2 podios.
2021 llegó con un enfoque de reconstrucción en que todos sabían que las victorias no estaban en el menú. Para este año salió Vettel y Carlos Sainz Jr. se volvió el compañero de Leclerc. La relación entre ambos pilotos siempre fue muy buena y eso se demostró en el trabajo en equipo de ambos para llevar a la escudería a ser la mejor del resto superando a su rival McLaren. En este año, el de Mónaco siguió deslumbrando al equipo, ahora con 2 poles y 1 podio que pudo ser victoria en el GP de Gran Bretaña.
Ahora en 2022, la espera dio sus frutos y Leclerc es un fiel candidato al título con 2 victorias (Bahrein y Australia) y 2 poles. Contando también con un Gran Chelem en Australia (hacer la Pole, liderar todas las vueltas, hacer la vuelta rápida y ganar la carrera). El inicio de temporada de Charles no es sorpresa, es un tema del destino que hasta ahora le da al monegasco la posibilidad de demostrar su talento de forma consistente en un equipo legendario como Ferrari. Pasadas 3 fechas, la pregunta ahora es ¿logrará conseguir el título Charles Leclerc y colgarse los laureles del olimpo de la F1? Si todo sigue de esta forma, lo más probable es que sí.
¿Tú que opinas de la carrera de Charles Leclerc? ¿Logrará ser campeón con Ferrari y marcar historia con los italianos? Te leemos en los comentarios.