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Foto del escritorNicolás Camacho

Regresando a la tormenta


Lewis Hamilton acaba de anunciar su regreso a las redes sociales tras casi 2 meses de inactividad por lo sucedido en Abu Dhabi 2021. ¿Significa esto que ya está listo para enfrentar esta nueva temporada 2022 de la F1?



No fue una noche fácil. De tenerlo todo en pista, dominar enteramente el ritmo de la carrera y tener en bandeja de plata su octavo título mundial; Lewis Hamilton vio como todo se desvanecía cada vez que veía pasar y desdoblarse a Norris, Alonso, Ocon, Leclerc y Vettel. Sin poder hacer nada, todo ese esfuerzo del Gran Premio se desvanecía y por el contrario, su acérrimo rival, el cual ya no veía ni por los espejos hasta ese momento, se le colocaba rueda a rueda y hambriento de arrebatarle su octavo para llevarse su primero.

Esto no tiene el objetivo de volver a revivir los fantasmas de Abu Dhabi, sino más bien crear unos nuevos, pues desde el momento en que Hamilton desapareció de la faz de las redes sociales hasta el día de hoy, han pasado muchas cosas que, podríamos decir, Hamilton no está preparado para afrontar, al menos no de momento.


La Fórmula 1 ya había pronosticado los cambios que se venían en 2022. Un cambio reglamentario inmenso que, directamente, sacó a Mercedes de su zona de confort. Tras una era híbrida que dejó a los alemanes como claros dominantes con: 8 títulos de constructores y de pilotos, 116 poles, 53 dobletes (1° y 2°), 228 podios y 5323.5 puntos. Solo encontraron rival en ellos mismos, Hamilton VS Rosberg y con Red Bull 2021. Esto no quiere decir que Mercedes tenga condenado su éxito en este 2022, lo que sí cambia es que ya no pueden irse a dormir tranquilos de que el próximo año les va a ir bien así no cambien absolutamente nada de su monoplaza. La incertidumbre es tan grande que nada se sabrá hasta los primeros test en Barcelona y Bahréin, y eso, porque estos resultados no son tan fiables como parecen.


Aquí entra el primer gran cambio que Hamilton debe enfrentar. Si bien ya se ha enfrentado a otros cambios reglamentarios como lo fue toda esa etapa entre 2009 y 2013 de una forma relativamente exitosa, esta vez no depende de él. De hecho nunca ha dependido de él, pues su conducción es casi perfecta y con cualquier cosa que le han dado ha hecho maravillas. Pero para llegar a la perfección se necesita ese plus que da un equipo con monoplaza ganador, algo que no es seguro en este 2022.


Si bien es cierto que Hamilton ha tenido un monoplaza ganador durante toda la era híbrida, tampoco es su culpa arriesgarse en 2013 a cambiar una escudería ganadora como lo era McLaren por un equipo de media tabla como venía siendo Mercedes. Lo que sí es cierto es que este 2022 promete ser una gran temporada, con muchos equipos en la batalla y más cercanía entre ellos, algo como el inicio de la 2012 o la definición de la 2010.


Mercedes ya no le puede prometer a Hamilton que va a pelear solo el mundial, pero esto no solo se ve en el monoplaza, también en los demás pilotos. Mientras Hamilton ha gozado de un presente exquisito, hay muchos pilotos que han sabido sufrir esperando esta oportunidad para probar la gloria.



No hay que ir muy lejos pues George Russell, su nuevo compañero, es la viva imagen de lo que esto significa. 3 años en Williams, un talento y una habilidad más grandes que su monoplaza y una oportunidad fallida en Sakhir 2020, son solo algunas cosas que describen lo mucho que Russell va a aprovechar estar en un equipo campeón. Sin embargo, al igual que a Hamilton, no le puede prometer un monoplaza campeón, pero de seguro sí irá bastante mejor que su antiguo Williams.


Por otra parte, el defensor al título y el #1 de la parrilla Max Verstappen renovó para ser el dolor de espalda de Hamilton al menos este año. Probablemente una de las cosas que genere más interés cuando suene el semáforo en Bahréin va a ser el encuentro en pista entre Hamilton y Verstappen. No sabemos si seguirán peleando por el mundial en 2022 pero siempre existirá el fantasma de antiguos duelos que sacaron lo peor de ambos. Un duelo que terminó a una vuelta y con la desaparición del heptacampeón por 2 meses, motivo que nos tiene aquí en este escrito.


Ferrari y McLaren se posicionan también como candidatos a pelear, no solo desde sus talleres sino desde sus pilotos. Con un Lando Norris y Carlos Sainz que buscan su primera victoria, como con Charles Leclerc y Daniel Ricciardo que saben lo que es subirse a lo más alto del podio pero han estado esperando la oportunidad de volverlo a hacer. Todas estas cosas son algunas que tal vez Hamilton no está listo para enfrentar, al menos hasta que se ponga el mono y los guantes que lo han mantenido como una figura mundial en la F1 desde el 2007 hasta la actualidad.


Escribo esto con la insignia de que realmente no se sabe qué pasará en este año. Hamilton por su lado, muy pocos saben qué estuvo haciendo en este tiempo pero debió de servirle mucho para que su regreso fuese un cambio en su foto de perfil y una foto con el mensaje: “I´ve been gone. Now I´m back!”. Sin embargo no basta con esto para hacer la vista gorda en todo lo sucedido.

Sir Lewis Hamilton ha vuelto a la tormenta con su gran actitud y marca personal que lo destacan en el paddock. Sin embargo, se va a necesitar un poco más que esto si lo que quiere es llevarse su octavo título en contra de muchos pilotos que buscan el primero y muchos equipos que quieren escribir la historia en un libro, que solo supo leerse en alemán durante los últimos 8 años.





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